La Evolución de las Especies
Seix Barral publicó en 1988 para su biblioteca breve el volumen "Godos, insurgentes y visionarios" de Uslar Pietri. Es un libro de ensayos sobre el tema recurrente en Uslar de la identidad americana, recoge quince reflexiones acerca de la forma como Europa asimiló la presencia de una cultura distinta la suya, de cómo se fueron moldeando las instituciones americanas hasta devenir a la actualidad. Habla de Colón, de los errores nominativos, de esa hazaña de vivir con un bagaje hecho de fragmentos de resonancias desiguales de un pensar que venía de las más altas cumbres, de esa contradicción que se se fue amasando en el tiempo para conformar esto que hoy somos.
Hay en este libro un acertadísimo ensayo titulado "La Legión de Malditos" que comienza rememorando el encuentro que Charles Darwin tuvo con Rosas, comienza con el hecho de que el naturalista inglés que llegaba a Argentina en su viaje del Beagle estaba encontrando nuevas especies casi desconocidas para Europa, y sin embargo, sin darse cuenta, por no estar dentro de aquello que esperaba ver o encontrar, estaba frente a una mutación no menos interesante que la de las especies biológicas: estaba frente al caudillo.
Estaba frente a uno de tantos caudillos latinoamericanos, de los hombres fuertes que imponen disciplina a una montonera desorganizada sólo con su palabra y su presencia y que son seguidos por vehemencia, por empatía y emoción, unos líderes que son erigidos en héroes por la masa que renuncia a la reflexión, a la razón y hasta la propia vida en una apuesta suicida.
Y toda nuestra historia latinoamericana está salpicada de estas figuras, "Juan Vicente González dijo, en frase audaz, pero muy significativa que "Boves fue el primer jefe de la democracia venezolana" y hay mucho de verdad en esa afirmación". Nos cuenta Uslar luego el destierro de Sarmiento en Chile donde fragua la figura de Facundo en una visión dicotómica del bien contra un mal que está personificado en estos hombres que ejercen el poder.
Cuando la carrera política de Boves queda truncada por su temprana muerte no es Bolívar, el culto, el aristócrata quien le sucede en la cabeza de ese ejército sino Páez, surgido del mismo medio agreste del llano, la facilidad con que los llaneros cambian de bandera es interpretada por Uslar como una muestra de que lo importante para esos hombres es "alcanzar el poder y la fuerza decisiva bajo un jefe propio totalmente identificado con ellos". Y una vez en el poder "con la constitución hacían lo que simbólicamente hizo Melgarejo, después de jurar sobre una nueva constitución republicana para Bolivia, metérsela en el bolsillo."
Esta es la legión de malditos a los que la historia no ha podido acercarse con la debida propiedad, con la mínima objetividad, sin los prejuicios heredados de un pasado europeo que no nos pertenece en realidad. Pero en la prosa quirúrgica de Uslar, el calificativo de malditos está apropiadamente empleado, sea que los asumamos como una parte de nuestra identidad, sea que logremos su estudio en forma satisfactoria para politólogos o sociólogos, sea los lográsemos comprender, que nos parezcan la solución por la fuerza o la máxima manifestación de nuestra decadencia social, la evidencia muestra que han causado un daño irreparable a la evolución de nuestros pueblos.
Es inútil, (pero muy difícil vencer su tentación) conjeturar acerca de todo lo que hubiésemos podido lograr sin las interrupciones que ha significado la presencia de esta casta de malditos en nuestra historia, sin olvidar a factores externos como el tristemente garrote de Rooselvelt no pueden obviarse preguntas sobre las posibilidades, sobre nuestras opciones acerca de ese destino anhelado y no visto.
Nos hallamos inmersos en una época y un lugar en los que cada cual hace el trabajo que no le corresponde, el personal de las industrias energéticas básicas en algún país se dedica a la ejecución de planes demagógicos descuidando su actividad medular en lo que va inmersa la posibilidad de fuertes interrupciones de servicios energéticos en el futuro inmediato, los periodistas de la fuente política se entrevistan entre si evidenciando la carencia de una clase política que atienda el llamado. Como en una novela de realismo fantástico vamos moviendo los límites el asombro, de la saturación cada vez mas lejos y se van llenando a los diarios con las más aberrantes y absurdas noticias que pasan a conformar una cotidianidad insólita
El reto que tenemos es planificar y ejecutar políticas públicas tendentes a erradicar la pobreza no a alimentarla, a definir un espacio para cada ciudadano, es decir, que cada rol se dedique a sus actividades productivas específicas. La tarea es abrir espacios para que cada ciudadano pueda expresar con libertad su opción y esa libertad implica la ausencia de las actuales condiciones de miseria que fuerzan y limitan la elección personal. esa libertad que implica el traspasar y superar la visión simplista e inmediatista de esperar que alguien nos represente y nos resuelva el día.
Darwin no lo vio, pero esos caudillos han evolucionado a estadios mas sofisticados, ahora buscarán arroparse en el doble discurso, en la autodeterminación de los pueblos, en la soberanía autodefinida, en la legislación que condena toda forma de disidencia, en las leyes que en nombre de los más caros valores cercena las libertades y por supuesto alimentarse en forma inmisericorde de la mentira, la pobreza y la necesidad de los ciudadanos. Nuestra política debe adecuarse a la máxima darwiniana de adaptarse a las condiciones de su nuevo entorno o perecer para dar lugar a los más aptos.